En una velada llena de devoción y alegría, la comunidad de Pica se reunió anoche para rendir homenaje a su santo patrono, San Andrés. La iglesia, corazón espiritual de la comuna, acogió a cientos de fieles que llegaron con fe y esperanza para participar en la misa de víspera, presidida por el obispo de Iquique, Isauro Covili.
Cuando el reloj marcó la medianoche, las voces se unieron para cantar el "Cumpleaños Feliz" a San Andrés, en un gesto cargado de emoción y agradecimiento. A partir de ese momento, la celebración se trasladó a la Plaza de Armas, donde las agrupaciones de bailes religiosos llenaron de color, ritmo y tradición el centro de nuestro oasis.
Danzas como la Morenada, Caporales, Tinkus y Gitanos envolvieron la noche con sus vibrantes coreografías y trajes deslumbrantes, recordándonos el valor de nuestras raíces y la fuerza de la fe que une a nuestra gente.
Pica, con su cielo estrellado como testigo, celebró una vez más su espíritu inquebrantable, llevando en alto el nombre de su santo patrono.